Los anales de paternidad necesitada de sueño abundan en relatos de lactantes con cólico que lloran incesantemente. Sin embargo, se están acumulando datos indicativos de que los probióticos pueden brindar a los bebés alivio del cólico, un trastorno digestivo que se considera vinculado con alteraciones de la microbiota intestinal.[1]
Aunque no se ha aclarado la patogenia del cólico, en un nuevo estudio se informa que el probiótico Bifidobacterium animalis subespecie lactis BB-12 efectivamente calma el cólico del lactante. En un estudio aleatorizado, con doble enmascaramiento, controlado con placebo, Rita Nocerino, CPN, del Departamento de Ciencia Médica Traslacional en la Università degli Studi di Napoli Federico II, en Nápoles, Italia, y sus colaboradores, encontraron que el tratamiento con BB-12 durante 28 días se asociaba a mayor tasa de reducción del tiempo promedio de llanto diario (≥ 50%), en comparación con placebo.
El efecto sobre el tiempo de llanto surgió ya desde la primera semana del aporte suplementario de BB-12. Al parecer el probiótico también tiene efectos beneficiosos sobre la duración del sueño y la frecuencia y consistencia de las deposiciones.
Los investigadores aleatorizaron a 80 lactantes sanos, pero con cólico, no mayores de 7 semanas, alimentados exclusivamente con lactancia materna para que recibieran placebo o una dosis diaria de BB-12 en dosis de 1 x 109 unidades formadoras de colonia. La media de edad de los lactantes era de poco más de 1 mes, y más de 50% pertenecía al género masculino.
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