Tanto el asma como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) pueden ser difíciles de diagnosticar, y los episodios de sedación o hipoventilación provocados por fármacos a menudo se pasan por alto como causas de exacerbaciones agudas en estas afecciones, según una carta publicada en The Lancet Respiratory Medicine.[1]
“Nos preocupa la cantidad de pacientes que hemos visto con asma o exacerbaciones de enfermedad pulmonar obstructiva crónica a quienes se les prescribió fármacos sedantes”, escribieron Christos V. Chalitsios, Ph. D., de la University of Nottingham, Inglaterra, y sus colaboradores.
Los autores señalaron que las exacerbaciones son las principales complicaciones tanto del asma como de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, y destacaron la importancia de identificar las causas y contar con estrategias preventivas.
Se ha demostrado que sedantes como los opioides deprimen el impulso respiratorio, reducen el tono muscular y aumentan el riesgo de neumonía, listaron. Los autores también propusieron que el riesgo de aspiración o hipoventilación inducida por sedantes estaría asociado con fármacos que incluyen pregabalina, gabapentina y amitriptilina.
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