Utilizando una nueva técnica microscópica, un grupo de investigación de universidades estadounidense demostró la presencia de 100.000 moléculas nanoplásticas por litro de agua en botellas de plástico que, debido a su tamaño, pueden penetrar en la sangre, las células y el cerebro.
Es probable que estas nanopartículas presenten efectos potencialmente tóxicos para la salud, lo que no deja de ser motivo de preocupación. El estudio fue publicado recientemente en Proceedings of the National Academy of Sciences.
Descubre el desconocido mundo de los nanoplásticos
En los últimos años, ha habido una creciente preocupación por la presencia de pequeñas partículas llamadas microplásticos en todas partes de la Tierra, desde el hielo polar y el suelo hasta el agua potable y los alimentos. Formadas cuando los plásticos se descomponen en pedazos cada vez más pequeños, estas partículas son consumidas por los humanos y otros seres, con efectos potenciales desconocidos sobre la salud y el ecosistema.
Se han encontrado en diferentes órganos en los últimos años, especialmente en los pulmones y el hígado de las personas. En cada caso se trataba de macroplásticos (ver cuadro a continuación). En lo que respecta a los humanos, su presencia ha sido motivo de preocupación desde que un estudio publicado en 2018 mostró que, de 259 botellas examinadas en 9 países diferentes, 93% presentaba signos de contaminación.
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