Ya en su casa de Puerta de Golpe; Raudel Piñero Lazo, está atento al comportamiento diario de la COVID-19, y es que recientemente; fue uno de los casos sospechosos del nuevo coronavirus.
“Me asusté mucho, comencé con tos seca, fiebre alta, deseos de vomitar y un dolor de cabeza terrible”; aseguró a esta reportera, el joven de 32 años que reside en el municipio de Consolación del Sur.
En su rostro aún se veía la angustia de aquel momento en que la incertidumbre lo golpeaba fuertemente hasta llevarlo a perder el sueño.
“Sólo de pensar que tenía COVID-19, era para mí el fin; imagínese soy hipertenso y durante nueve días mi tensión arterial tratada con captopril se mantenía alta; claro, estaba asustado y me deprimía al pensar que en mí todo podía ser muy grave”.
Piñero fue ingresado por nueve días en el centro de aislamiento del Instituto Superior Pedagógico Rafael María de Mendive; allí le realizaron el PCR, varios días de incertidumbre; pero bien atendido por todo el personal médico y paramédico; incluyendo la atención de los estudiantes universitarios que allí apoyan cada tarea.
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