Día de la dignidad Pinareña



La jornada de homenaje a la medicina latinoamericana y al trabajador de la salud (8 noviembre, nacimiento del Comandante Manuel Piti Fajardo – 15 de enero, día de la Ciencia cubana) abarca un período de tiempo que agrupa fechas memorables del salubrismo cubano.
El 26 de noviembre se celebra el Día de la Dignidad Pinareña en reconocimiento a la fundación por el Dr. Tebelio Rodríguez del Haya (1906-1978) del Comité Todo Por Pinar del Río (1941-1962) una institución que con el lema “Dejemos de ser la Cenicienta” convocó mediante el trabajo voluntario a toda la sociedad pinareña para sanear y eliminar la insalubridad que reinaba en la ciudad producida por el abandono de las autoridades gubernamentales de entonces.
Martiano práctico escogió esa fecha en homenaje a los 50 años del discurso del Apóstol de la Independencia de Cuba “Con todos y para el bien de todos” uno de los más memorables de su apostolado independentista.
El prestigio y reconocimiento del doctor Tebelio, como desde entonces era llamado con cariño por su pueblo, facilitó que junto a un grupo de personalidades, convocara a la sociedad pinareña a trabajar para eliminar las condiciones que afectaban la salud de la población y la calidad de vida de sus ciudadanos provocando enfermedades principalmente en los niños y las personas sin recursos.
Mediante la participación voluntaria de las personas, de instituciones públicas y la recaudación de donaciones financieras hizo posible la higienización de la ciudad, la canalización de las zanjas que la rodeaban contaminando la ciudad y el incremento de vectores, que diera origen a llamar a Pinar del Río con el apodo de Cenicienta.
Con su liderazgo como médico y ejemplo cívico, se lograron los propósitos del Comité haciendo de la higiene un valor en la ciudadania que fuera replicado por otras ciudades de la provincia y del país.
Lograr una conciente participación popular fue su principal aporte que luego generaría conductas más responsables sobre la preservación de la higiene y salud en la población y las comunidades a través de su participación responsable y voluntaria.
En 1942, en el balance del primer año del Comité con muchas de las tareas logradas, algunas de estas perduran hasta hoy, y en reconocimiento a la obra de ese querido médico se estableció oficialmente esa fecha para celebrar el Día de la Dignidad Pinareña que al triunfo de la revolución fuera preservada hasta hoy, junto al Himno del Comité asumido como el de la provincia pinareña que con orgullo cantamos en los principales eventos.
Hoy, nuestra provincia enfrenta situaciones críticas con la higiene y el mantenimiento del entorno en que vivimos provocados por limitaciones económicas pero también por inadecuados comportamientos de la población que impiden preservar el medio ambiente en que vivimos, se debiera retomar la voluntad de entonces legada por un humilde médico como lo fue Tebelio, todo un símbolo de recordación de lo que desde el voluntariado consciente seríamos capaces de hacer para la resiliencia necesaria por todos los ciudadanos para la recuperación de Pinar del Río como la hermosa y hospitalaria catedral ecológica de Cuba.
Es un hecho relevante de salud de un digno origen salubrista que debiera ser promovido su conocimiento en nuestras aulas en todos los niveles de enseñanza y en los medios de divulgación como ejemplo responsable de conducta ciudadana que fue posible.
Hagamos del Día de la Dignidad Pinareña no un día sino una jornada como un espacio permanente para promover estilos de vida saludables desde una sola salud, y alcanzar el deseado bienestar que merece nuestro pueblo.
Dr. Joaquín Pérez Labrador
Profesor Consultante
Universidad de Ciencias Médicas de Pinar del Río
Sección de base Ciencias Médicas Unhic.

Leer noticias en Infomed Pinar